La formación continua es un elemento clave para el desarrollo, evolución y mantenimiento del ser humano, y de las empresas, y más aún en estos momentos de grandes cambios y transformaciones en los diversos ámbitos del quehacer diario.
Temas como la globalización, la revolución tecnológica, las nuevas economías, la internacionalización de las empresas, entre otros; están generando cambios metodológicos, funcionales y/o estructurales, haciendo surgir nuevas necesidades y demandas de talento, planteándose de esta manera a la formación continua como una excelente vía para comprender, adaptarse y readaptar las habilidades y conocimientos a las necesidades emergentes.
La importancia del fomento de la formación continua se hacen evidente porque el formarse constantemente le otorga a la persona un incremento en su motivación, que se integre más a la una empresa, y eleve mas sus valores al darse cuenta que la empresa los valora e invierte en su capacitación. De esta manera la empresa también podrá dar respuesta efectiva a los cambios y demandas del mercado, haciéndose más competitiva, al contar con un talento humano capacitado y actualizado.